viernes, mayo 21, 2010

Me Autorreferencio

Se entiende ¿verdad?

Si, bueno, extrañamente la mayoría de las veces creo o considero (sólo dilo) que el escribir dos entradas en el blog es señal de no tener vida propia, pero aquí voy.

Un momento, Ann dice que tengo justificación debido a que la entrada fue cuando éste día apenas estaba empezando y que la historia de Un Café la tenía desde ayer a la una de la mañana, bueno, no importa.

Continuando, me encontraba leyendo entradas anteriores de mis blogs, mis escapes bizarros por este medio y oigan (bueno, lean) no me había percatado que mis personalidades fueran tan evidentes en las entradas, si yo me leyera a mí misma, si me auto-siguiera, jamás adivinaría qué cosas voy a leer, incluso cuando somos nosotras quienes escribimos (¿porqué me siento Gollum?, precioso, mi precioso café).

A ciencia cierta, no sé quién dictará las palabras que se filtran por el teclado, de hecho, la mayoría de las veces pongo el titulo al final de los posteos, pues ni al empezar puedo discernir cómo va a terminar el escrito, así que me considero una persona muy espontánea, impredecible...Y predecible a la vez.

Para las personas que me rodean, saben que si no estoy en casa, ni en el trabajo, ni con Tiffa, estoy en la biblioteca; saben que en mi cuarto si no está la música a todo volumen es porque estoy viendo una película, que si está a todo volumen estoy leyendo o escribiendo, si estoy cantando es que estoy haciendo limpieza, entonces ¿dónde quedó la espontaneidad?... Ah sí, ahora recuerdo, en mi cabeza.

No, alto, este no era el punto, ¿o sí?, carajo, eso pasa cuando todas hablan a la vez y mis dedos no son tan rápidos (aunque creo es una ventaja para el lector).

Acabo de resolver tres sodukos de un jalón, digamos que se traduce a vomito cerebral, ¿qué quieren? amo los números y es lo único que reta a todas, ya saben, silencio aquí arriba, es como cuando eres niñera y pones la televisión para los engendros del mal y que permanezcan quietos por un rato.

Si, bueno, la verdad es que no he dormido mucho, bueno, menos de lo normal; sé que con cada noche en que no duermo las seis horas recomendadas estoy acortando mi existencia, lo que me recuerda...

Me choca que me digan qué hacer, me choca que se crean que me conocen y me digan qué, cómo, cuándo y porqué de las cosas que me dicen qué haga (¿notaron el cambio de personalidad?), una trata de portarse "bien". Me purga que me pregunten: ¿estás enojada?, nada más porque no ven riéndome sola, porque todo el día en la oficina, acompañada de máquinas (me encantan mis compañeras de trabajo) creen que estoy enojada, pero les apuesto que si me pongo a reír sola me van a tachar de demente... bueno, es cierto pero que no se quejen, ya bastante tuve con resolver su prueba psicológica... sí, obviamente hice trampa, es la ventaja de tener a una hermana que estudió para educadora.

El punto es que para evitar tan estúpida pregunta me adelante e hice un intento patético de ser una persona normal, y ahí me ven haciendo referencia a mi insomnio (quizá voluntario), el tipo me dice que es por el café y le lanza una mirada asesina a mi taza humeante y después me mira como diciendo "¿no te has dado cuenta?" Poniéndole una mordaza a Ann, le contesté que no era eso, ya que lo "sufro" (no le iba a decir que prefiero no dormir), desde que había entrado a la facultad y no tomaba café en esos tiempos.

Y ahí va el genio a decirme que es porque no hago ejercicio (sospecho que sólo hizo esa referencia para presumirme que él corre todas las tardes durante una hora, bajo el sol. Yo lo creo un estúpido), no le contesté, sólo lo miré, ahí es cuando me doy cuenta de lo "distraidos que son", no se dan cuenta de si les pones atención o no, se sueltan en su rollo creyendo que sus palabras traerán mi salvación y que pasaran a la historia por haberme salvado la... el sueño.

Sus "consejos" se tornaron como órdenes a mis oídos, me exigía que fuera a hacer ejercicio, que las personas no lo hacen por "flojera", por lo tanto, me llamó floja, pero ¿qué rayos se cree éste tipo, sanador universal o qué?, carajo, si en verdad quisiera dormir me drogaría con algún antigripal, o iría a ver la televisión, me alcoholizaría, contar ovejas, leer la biblia... (no, ésa es una mala idea, si no estoy de humor me insta a que maldiga), o cualquier cosa, incluso sería capaz de... bueno, no importa.

El punto es que sus palabras se volvieron medias ofensivas, y La Voz dejó salir a Ann para que el tipo se largara, pero ya saben, o hablo japonés o de plano todos sufren problema auditivo o no alcanzan a enlazar mi gesto con mis palabras y el tipo creyó que estaba bromeando y se marchó.

Jamás voy a tratar de ser "normal", las consecuencias son muy desastrosas para alguien como yo.

Como la vez que traté de ser normal y "buena amiga", me dejé convencer para ir a una graduación, me encuentro con un ex de la secu, no sé cómo rayos en una hora volvimos a "intentarlo", el resultado: una semana después me encontré en una disco (¿ya he mencionado que odio esos lugares cerrados con humo de cualquier hierba seca, con música horrible y llena de adolescentes estúpidos?, ¿no?, bueno, ésa será otra historia), con una bebida amarga (¡odio la cerveza!), tratando de distraer a mi cerebro que se empeñaba en descifrar de dónde provenía cada olor, con idiotas en todas partes, música que trataba de disminuir mi capacidad mental y con un tipo que me miraba de manera extraña.

Así que para la próxima, me voy a autorreferenciar más seguido.

3 comentarios:

Ricardo dijo...

Te recomiendo un documental, se llama Metal, A Hadbanger''s Journey, ademas del aprendizaje obtendras muchas frases interesantes, a mi me gusto.. Sobre todo en la parte en que no usa la palabra "weird" (esta en ingles, el documental) sino "Outsider" para referirse a los MetalHeads..

Mar dijo...

Lo busqué pero sin mucho éxito, de todos modos no dejaré de buscarlo.

Gracias por comentar

Ricardo dijo...

buscaste en taringa? XD Ahi lo encontre yo, o si no busca en Youtube, esta por partes, pero vale la pena, dura una hora y media, si mal no recuerdo..