martes, septiembre 14, 2010

Sobre El Pasto

¿Hace cuánto que no me había tirado en el pasto a escucharlo crecer, sin prisas, sin traumas y moqueando? Apuesto a que es la primera vez... sin traumas.

Después de tres semanas de encierro, por fin salí de casa todo un fin de semana y lo mejor fue permanecer en el pasto con un cielo muy nublado que no se decidía si llover o no. Las pequeñas gotas caían en mi rostro y el aire era muy frío. Pese a la moquera que traía y negandome a aceptar que la gripa me había ganado ésta vez (no, no estoy aceptando que me ganó, no tomé medicamentos y ahora sólo tengo un leve moqueo, pero por lo demás como si no me hubiera enfermado) permanecimos ahí toda la tarde.

Lo segundo mejor fue que encontré Mujeres De Ojos Grandes de Ángeles Mastreta en pasta dura y Cumbres Borrascosas de Brontë en edición Porrua a muy buen precio. Y lo tercer mejor fue que el domingo nos dedicamos a ver peliculas mientras armabamos un circuito (me agrada pelar cables) y comiendo helado.

La matiné estuvo conformada por Corre Lola Corre, Si Te Casas Te Mato, con Jennifer Lopez donde decidimos que nos urge un proyecto y a Tiffa le va el personaje de Ruby, por lo de decir "carajo"; El Diablo Se Viste A La Moda donde yo me quedé con en personaje de Miranda Priestly aunque quería el de Andrea, pero digamos que he vendido mi alma por helado así que no desaprovecharía la oportunidad de ser una oportunista, aunque ver el trabajo detrás de la moda, no sé, sigo sin respetarlo mucho que digamos, digo, es sólo ropa ¿no? y eso de llegar a comer casi nada para alcanzar una talla ridículamente pequeña y tus huesos sobre salen de forma alarmante... dejemoslo en que jamás diría que no a una pizza con extra queso y a los churros rellenos. ¡Quiero un churro relleno de lechera o cajeta y crujiente!

Ahora que lo pienso, no sé porqué se me da eso de identificarme con los villanos de las historias, Caroline Bingley de Orgullo y Prejuicio, me sé los diálogos y todo, Bellatrix Lestrange de Harry, puedo reírme exactamente igual; Catherine de Cumbres Borrascosas, creo que ahora mismo me estoy comportando como ella y sin Heathclif, Carrie de King; ésa chica sabía lo que hacía, etcétera, etcétera (quizás no lo hayan notado, pero me he propuesto no ser tan floja y escribir el "etcétera" sin abreviarlo. He ahí la urgencia de un proyecto).

Como sea, el punto es que a veces me agrada tener planes, a veces no, porque no se me dan, siempre cambian.

Ésta vez no era nuestra inteción embriagarnos, ibamos a portarnos bien. Como siempre, pero Dioni nos sonsacó con los alcoholes y Tiffa terminó presentándome al Karma.

Dejé mi mochila al lado del bote de basura. Abierta. Yo  moqueaba repetidamente después de unos cuantos estornudos, por lo que estuve practicando mi punteria, pero resultó que después los papeles que aventaba rebotaban en la esquina de un mueble e iban a dar al interior de mi mochila.

-Marcia- me dice Tiffa entre carcajadas-, te presento al Karma.

Lo que no sabía Tiffa, o ignoraba, es que el Karma y yo nos conocemos desde hace mucho, pero no llevamos una relación muy buena (desacuerdos para decidir lo que es justo y lo que no) y aunque me esforcé por saludarlo con la sonrisa de "largo" no se marchó durante toda la noche, pues hasta los papeles que aventaba Tiffa terminaron cayendo en mi mochila. Maldito Karma.

El domingo tuvimos que salir a un cajero que más bien parecía una cueva en medio del bosque porque "descuidado" o "sucio" no abarcaban lo mal que estaba. Lo sorprendente era que funcionaba.

Cuando terminé las transacciones estaba un tipo afuera y nos dice:

-Se descuidan mucho chicas.

Tiffa me pregunta si nos veíamos muy despistadas, a lo que yo contesté que sí porque no me había dado cuenta de que el tipo estaba ahí.

-Pero no me preocupa- le dije y agarré su brazo, lo sostuve frente a mí apuntando a un enemigo imaginario y añadí amenazadoramente:- Tengo una Tiffa y estoy dispuesta a utilizarla.

Sip, todo ocurrió en la calle.

Si creen que exagero es que no les he dicho que Tiffa, cuando se enfurece, da miedo.

Aún recuerdo un trauma que me originó cuando yo era una jovenzuela pura e inocente en primer semestre en la universidad, por alguna razón ella estaba enojada (Tiffa se enojaba por todo y yo apenas la conocía) y la profesora comentó algo gracioso y todos rieron. Al verla toda sería le señalé el chiste, pues pensé que no lo había escuchado pero giro su cabeza a lo Regan MacNeil y con tono más que lúgubre y amenazador me dice: "A mi no me da risa"

Confieso que quedé traumada, el primer trauma de una serie de ellos que siguieron después, como cuando le quité el alacrán, me obligo a aplastar a una abeja entre mis dedos, obligarme a probar su agua salada para confirmar que estaba salada (y en efecto, estaba salada), regalarme unos aretes, llamarme a las 4 de la mañana, regalarme mi reloj sin ser día festivo ni nada y esto no tiene nada qué ver con lo que estaba escribiendo.

Y todo lo anterior fue para justificar las siguientes fotos que son lo más importante del post, y aún así no son de buena calidad.




Éste árbol se ve genial.

PD1. Sobre la relación nada grata con el Karma: Les pido que si ven por ahí mi "Puente Patrio" lo saluden por mí ya que desapareció. Voy a laborar el viernes y así le dije: "Adios, ve y haz feliz a alguien más crudo que yo"

PD2. Me sentí como la hoja de la imagen, sólo que con los colores invertidos.

2 comentarios:

Guerrero dijo...

Que bonitas fotos, aunque sea nos llvaremos un buen recuerdo del pasto el viernes, comparto el dolor contigo... creo que tambi´n and pagando tu karma, porque no hay otra forma de explicar por qué yo tendré clases viernes xD

saludos

Mar dijo...

Lamento que mi karma te haya alcanzado.

Saludos.